Los tomates secos , típicos de la cocina mediterránea, no sólo son un alimento sabroso con el que preparar o dar más sabor a nuestros platos, sino que también son un concentrado de virtudes beneficiosas para el cuerpo.
Esta variedad de tomate es de pequeño tamaño, redondo y de un color anaranjado que se torna rojizo. Son tomates muy regulares tanto en forma, como en tamaño.
El tomate es rico en vitaminas y minerales: esta hortaliza aporta vitamina C, un potente antioxidante natural, además de vitamina A, K, hierro y potasio. El tomate protege la vista: contiene vitamina A, la cual ayuda a proteger nuestros ojos de enfermedades degenerativas o ceguera nocturna
Actualmente, el hongo shiitake es el segundo hongo más cultivado en el mundo.
Su sabor ligeramente picante convierte a la rúcula en una verdura ideal para añadir a ensaladas con ingredientes como el pollo, queso o nueces.
Podemos tomarla cruda, en ensalada o cocida y de todas las maneras mantiene las mismas propiedades.
Una vez cocida, se puede conservar en vinagre o en azúcar, y ser utilizada para obtener el vino de remolacha.
Excelente fuente de vitamina C, potasio y yodo. Ayuda a restaurar tejidos y vasos sanguíneos, aumentando el nivel inmunológico del cuerpo.
Ayuda a mantenerse joven combatiendo el envejecimiento. Esto se debe a su alto contenido en antioxidantes.
Puede ingerirse tanto crudo en ensaladas como cocido al horno, pero nunca hervido, ya que perderá todas sus vitaminas hidrosolubles.
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